La casa de los 1000 cadáveres

 Fue la película con la que Rob Zombie, ex-miembro del grupo white zombie, se inició en el mundo del cine, compaginándolo con su proyecto musical. La película recrea a la perfección el ambiente que ha intentado transmitir también en su carrera musical.

Una familia de perturbados mentales que se divierte torturando a sus victimas mental y físicamente, hasta dejarlas agonizando o llevándolas a la locura extrema. En este caso los afortunados serán un grupo de adolescentes.

Ficha técnica
Dirección: Rob Zombie.
Guión: Rob zombie.
Producción: Andy Gould.
Reparto: Sid Haig, Bill Moseley, Erin Daniels, Sheri Moon Zombie.
Música: Rob Zombie, Scott Humphrey.
Fotografía: Tom Richmond, Alex Poppas.
Montaje: Kathryn Himoff, Robert K. Lambert, Sean Lambert.
Diseño de producción: Gregg Gibbs.
Vestuario: Amanda Friendland.
País: Estados Unidos.
Año: 2003.
Género: Psicópatas.

 

 

Crítica:

La película, como tantas otras, recuerda sospechosamente a la matanza de Texas, una familia de maniacos con ganas de sangre, y un grupo de adolescentes que tienen que buscar un sitio donde pasar la noche. Todo encaja hasta tal punto que aparece Bill Moseley (actor que hace de Choptop en la matanza de Texas 2). ¿Homenaje o plagio? Ustedes mismos.

Quitando la poca creatividad de la historia, está bien para pasar un rato divertido, viendo como una familia de chalados se divierte, mientras suena una sinfonía que incitan a la locura creada por Rob zombie. Aquellos aficionados a la música de este singular personaje, disfrutarán sintiendo en imágenes los perturbado ritmos de sus canciones.

Una actuación a destacar es la de Sid Haig, que interpreta una especie de payaso cabrón con muy malas pulgas. Quizás es quien le da el toque de humor a la película, sin quitar por supuesto las obras del artista de la familia.

Puntuación: 3'5

Por Félix A.D.